jueves, 17 de febrero de 2011

Entre alegrías y tristezas .... pienso

 Hace tres semanas decidimos con mi íbérico esposo acudir a una clínica privada para obtener más información sobre nuestro bebé, y si, caimos en la tentación (debo reconocer yo más que él), en tener un recuerdo de este momento tan especial.  Lo primero que preguntamos es que  si esta bien, el doctor nos dijo que si, pudimos identifcar su rostro, sus manos y piececillos, su columna, su corazón ufffff  es una sensación maravillosa...en algun momento me quedé como hipnotizada con las imágenes, con tanta ternura.....y llegó el momeno en qué también preguntamos y ¿qué es? .... nos dijo que claramente se ve a  una niña .....se me vino entonces el nombre elegido casi desde su concepción  L A U R A.

Desde entonces nuestras conversaciones, canciones y demás diálogos (porque ella si que me responde a través de sus movimientos),  son más personalizados.

En medio de tanta alegría, se me ha hecho imposible no pensar en una amiga boliviana, que el pasado verano (de aquí invierno de allá), vivió talvez lo más doloroso de su vida.... perder a su bebé en el momento del parto... todo por negligencias médicas, sin responsabilidad alguna de parte del hospital ni de los médicos que la atendieron.  Cuando estaba  con ella y escuchaba por todo el calvario que paso  no dejo de pensar en que la verdadera pobreza de un país se refleja en los pocos recursos destinados a la Salud y Educación.

No es casual que las nuevas generaciones bolivianas ya no tengan seguridad social al menos de parte del Estado, si uno se la puede costear de manera privada pues tiene  la posibilidad de enfermarse, caso contrario seguiremos recurriendo a oraciones, a nuestros matecitos de coca y demás hierbas, o a nuestras recetas caseras.

Sé que el servicio médico  que ofrece el Estado español, puede tener sus deficiencias,  pero algo que se valora poco es que es para todos,  que hay un control  detallado  y cuidadoso al menos con las mujeres embarazadas, que el trato es cordial, educado..... hummmm estoy completamente segura que si mi amiga hubiese tenido el parto en cualquier hospital español ahora  mismo estaría un niño en sus brazos.