Parte IV

Y finalmente lo que hizo que sintiese la Navidad como una niña, fue el clima … hummm justo aquella primera Navidad como alguna más que recuerdo nevó, sí….. aunque yo soy de La Paz que es una ciudad de clima frío, en Navidad no recuerdo nunca que nevase por estas fechas; allá justo ahora estamos en verano, tal vez un poco especial (18 a 20º nada comparado con la temperatura del verano madrileño)…. Vaya fue emocionante empezar una guerra de bolas de nieve o construir al típico muñeco de nieve mientras las manos se te ponen coloradas de tanto frío…..


Pese a los problemas o dificultades que debo afrontar por ser inmigrante, estoy convencida que he recibido mucho de vuestro país (costumbres, palabras nuevas, amigos y amigas, retos por superar, etc), en este sentido hummmm me gusta la Navidad porque como diría Jorge Drexler :

“cada uno da lo que recibe y luego recibe lo que da, nada es más simple, no hay otra norma, nada se pierde, todo se transforma”…..

y ojo cuando hago referencia al “dar” no me refiero al simple y vacío consumismo hago referencia al “darte” al otro con sencillez, regalando una sonrisa o un buenos días…. O simplemente creyendo que “todo, todo es posible” ….