viernes, 8 de enero de 2010

AVATAR



Aprovechando las fiestas de fin de año, fuimos a ver una película … hummm tal vez la elegida fue más motivación de mi “ibérico” esposo …. debo confesar que tenía ciertos reparos (no me atraen mucho este tipo de películas), y aunque acabé con un dolor de cabeza por el movimiento de imágenes (menos mal no la vimos en 3D), o porque nos tocó verla demasiado cerca …me hizo pensar en muchas cuestiones interesantes que quisiera compartirlas:

Desde luego la trama era más que conocida, la invasión o intrusión a poblaciones aparentemente “débiles” y “atrasadas”, con la finalidad aparente de proporcionarles una “mejor vida”, pero claro había una verdadera razón para esta intrusión, la explotación de recursos naturales (cómo no pensar entonces en la conquista de America, cómo no pensar en las transnacionales que van a “invertir” a países “tercer mundistas”), asimismo había personajes cuya su pretensión era distinta a la del grupo al que pertenecían, trabajaban por conocer su modo de vida, respetarla, difundirla y para ello se proponía la integración-infiltración entre ellos, lo cual me hace pensar en si ¿verdaderamente esto podría ser posible con tantísimas diferencias, incluso de especie???? …y entre los indígenas habría aceptación a los otros??? … como siempre había en ambos bandos, gente que rechazaba al otro por las diferencias antes mencionadas… entonces la pregunta es inevitable …. ¿Cómo podemos integrarnos a otra cultura y cómo podemos integrar a otros en nuestra cultura????

Una de las posibilidades de respuesta a estas preguntas la trabaja la película de esta manera:
  • El ex -marine, para integrarse y hacerse parte de ellos, empieza a aprender sus costumbres, idioma, respetar a la naturaleza, etc. Considero que hay un verdadero aprendizaje cuando se “quiere” realmente aprender, por supuesto esto estará determinado por una motivación personal, pero finalmente habrá un aprendizaje significativo cuando se puede transferir este aprendizaje a situaciones reales (en la película como conectar con otros seres del bosque)… bajo esta idea, tal vez lo más complicado al principio en este proceso de aprendizaje para éste ex -marine, era la perspectiva/intencionalidad con la que aprendía, inicialmente él creía que su cultura podía aportar más a los indígenas que los indígenas a la suya….situación que me hace pensar en que generamos muchos tópicos por falta de información de la otra cultura. Compartiré algunos tópicos que viví en carne propia como “aprendiz de esta nueva cultura”:

    Algunas personas cuando sabían de mi procedencia la generalizaban como “sudamericanos”, y cual frutería podría decir que tanto los europeos como los sudamericanos gozamos de una variedad de todo tipo (acento, costumbres, lengua, etc); también me llamaba la atención los siguientes comentarios que me hacían:

    qué cuantos hijos había dejado en mi país al venirme acá….cuando decía que ninguno, veía sorpresa….
    Sorpresa también cuando decía que tenía una formación universitaria
    Sorpresa de emplear el ordenador, más aún que sabía escribir ….

    Me doy cuenta que estos tópicos provienen de generalizaciones, puesto que la mayoría de los inmigrantes que han decidido salir de mi país y de otros muchos ha sido forzada por la necesidad económica (un gran porcentaje con una formación básica y muchos otros que provenían del área rural, por ende con más carencias educativas) y por supuesto con el resultado de mucho desgarro (separación de la familia).

    Bueno, pero también me doy cuenta que me dejaba llevar por ciertos tópicos (hoy en día menos que antes) hacia esta nueva cultura en la que vivo:

    Que España al pertenecer al primer mundo, tenía 0% de pobreza … (hasta que conocí a niños de la Cañada Real).
    Que España era una sociedad católica (hasta que me pude informar del rol que tuvo la iglesia durante la guerra civil).
    Que la mayoría de la gente tenía una formación universitaria (muchas personas siguen un tipo de formación alternativa, por ejemplo los ciclos formativos en grado superior; o deciden incorporarse al ámbito laboral que no requieran formación superior).


    Sin embargo lo que realmente me dejó pensando fue la escena cuando este ex -marine empieza a vivir casi a gusto “fuera de su cuerpo”, cuando se empieza a cuestionar sobre la vida paralela que lleva, manteniendo una misma forma de ser, pero desde luego en otros momentos perdiendo la perspectiva de cuando está en la realidad que le limita (no poder caminar), a cuando vive su vida a través del avatar que le permite afrontar desafíos,… , si pienso en mi propio proceso de inmigración me sucedía exactamente lo mismo, si, físicamente estaba acá, y la realidad superaba mis expectativas, pero también no dejaba de pensar en lo que había dejado atrás, hasta el día de hoy me muevo en dos franjas de horario, en dos culturas con ciertas similitudes pero con diferencias, sé que cuando estoy desayunando allá todavía no amanece, que cuando estamos acabando el día allá todavía estamos en horario de trabajo, en fin….familia, aromas, sabores, lugares, canciones, personas, formas de ser, etc que están incorporados en mi memoria me mantienen en esta vida paralela …

    En fin Avatar, me hizo pensar en la realidad de muchos inmigrantes, que por diferencias de lengua, raza, cultura, etc; viven una situación similar al protagonista de la historia.

    Me gustó además el momento de aprendizaje de nuevas costumbres, en términos de Piaget, el proceso de asimilación y acomodación…para llegar al equilibrio cuestión difícil para muchos que dejamos nuestras costumbres, nuestra cultura…

4 comentarios:

  1. Hola Raquel, todavía no he visto la película, estoy por verla pero por una cosa u otra no he podido, despues de leer tu reflexión pues mas ganas tengo de verla.

    Me parece interesante tu exposición sobre el tema, el proceso de inmigración y sobre todo el de integración es tan complicado que creo nunca podremos dar con una solución que satisfaga a todos; implica tantos factores: físicos, emocionales, espirituales, económicos, costumbres, valores, etc.

    Sin ir muy lejos, mi pareja (española) no entiende como vivo añorando y llorando (todavía hoy) mi gente, mis costumbres, los olores y sabores de mi tierra, dice que vivo mas pendiente de lo que allá ocurre que lo que sucede a mi alrededor, y a lo mejor es cierto, más no quiere reconocer que con el tiempo esa intensidad a mermado, porque con el tiempo esas emociones se calman mas segura estoy que no dejarán de existir, con ello nací, crecí y viví durante 38 años; estoy consciente que he venido a un lugar nuevo, con nuevos olores, costumbres, valores, para una nueva vida, pero reconozcamoslo somos como somos por lo que hemos vivido y con ello moriremos.

    No dejaremos de ser bolivianos, venezolanos, suramericanos, por estar e integrarnos en España;no es fácil porque muchos españoles nos discriminan por nuestra procedencia, pero sabes que despues de molestarme porque alguien me haga un mal gesto, etc., pues me digo ellos se lo pierden.

    En fin es un tema para rato, de nunca acabar, hay para todos los gustos y pensamientos.

    Gracias amiga...

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  2. Agradesco tus palabras y análisis tan detallado y sentido....es verdad lo que dices, me siento identificada contigo, vivimos añorando nuestra esencia que sólo puede llegarse a entender cuando te desarraigas aunque sea por amor como en nuestro caso ....vivimos con el síndrome de Ulises, constantemente viajamos a nuestro hogar a partir de aromas, melodías, palabras con cierto acento, en fin.... nos vamos acomodando, si desde luego si no cómo podríamos sobrevivir.... pero que tristeza nos invade cuando sentimos impotencia por no poder movernos "como peces en el agua", por muchos factores, discriminación, burocracia, o simplemente añoranza..... lo bueno de todo esto es que el mundo, nuestro mundo se ha hecho mas amplio, más tolerante y sobre todo vamos conociendo nuevas culturas....

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  3. Quisiera contarles que también hay personas del propio país que, sin salir de él, se sienten "de otro lugar". Gente que ha podido viajr a otras tierras, que se ha enamorado de ellas, que ha vuelto a la suya y que ha descubierto, desde entonces, que la suya es también aquella, y que su tierra ya no es sólo una, sino las dos. Tampoco se vive del todo "tranquilo" en esa situación, porque mientras vives en tu país, también recuerdas el otro. Y cuando estás en el otro, muchas cosas te traen a la memoria el primero. Pienso que, una vez que uno viaja y conoce otro lugar del que se queda "prendado", ya nunca puede volver a ser el que era. Se ha convertido en un habitante de la frontera. La forntera entre esos dos mundos es su casa y su destino, por más que intente olvidarlo. Y vivir en la frontera no es fácil. Aunque para qué engañarnos, vivir " a secas" tampoco lo es.

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  4. Al final, mi experiencia me va enseñando que no sólo somos de "un" lugar como bien dices, sino que vamos nutriéndonos de diferentes culturas, formas de ser, de pensar, de otros idiomas, aromas y sabores.... por ello comprendo tu punto de vista, y como bien dices concluiré diciendo que la mayor ventaja de viajar fuera de casa, es abrir tus ojos y tu corazon a nuevas experiencias.

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